El presidente Andrés Manuel López Obrador retomó sus críticas hacia los organismos autónomos, centrándose especialmente en el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), durante su conferencia mañanera del 12 de febrero en Palacio Nacional.
En estos días, López Obrador no dudó en referirse nuevamente al ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Javier Laynez Potisek, como “su alteza serenísima”, resaltando su oposición a las reformas propuestas por el gobierno.
El mandatario mexicano destacó la necesidad de una reforma constitucional para eliminar a estos organismos autónomos, señalando que fueron creados durante el periodo neoliberal, en el cual, según sus palabras, el gobierno fue tomado por una minoría en detrimento de la mayoría de los mexicanos.
Criticó el papel del INAI, señalando que nunca actuó contra la corrupción que imperaba en administraciones pasadas, mientras los funcionarios públicos gozaban de privilegios como sueldos elevados y gastos excesivos en viáticos y entretenimiento.
Ante este panorama, López Obrador presentó una iniciativa para que el gobierno asumiera las funciones que actualmente desempeñaban estos organismos autónomos, enfatizando en la importancia de la transparencia y el uso eficiente de los recursos públicos.
La postura del presidente mexicano generó debate en torno a la autonomía de los organismos públicos y su papel en la fiscalización del poder ejecutivo, mientras la ciudadanía observaba de cerca este proceso de reforma constitucional que podría reconfigurar el entramado institucional del país.
